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1. Mercados de acopio
Los corrales proporcionados para tener el ganado, las básculas de pesar, etc., a menudo siguen sin utilizarse. La dotación de estas instalaciones de forma normalizada no debe realizarse hasta que no se haya demostrado su valor con ensayos. No es probable que los vendedores ocasionales puedan juzgar correctamente los pesos como los compradores especializados, además raras veces piensan que valga la pena pesar los animales en vivo. Lo más importante para los usuarios de estos mercados es el acceso a puntos de agua y a forrajes si los animales tienen que recorrer un largo camino, y cuando se trata de climas cálidos, la protección del sol mediante cobertizos. Cuando los animales se cargan o descargan de vehículos, son indispensables las rampas con vallas.
2. Información de mercados
Lo mejor es comenzar con los precios al por mayor para la carne en canal en los puntos reconocidos de distribución y, a falta de estos datos, de la carne según se vende en los establecimientos específicos por menor. Las variaciones en estos precios pueden luego interpretarse retroactivamente a las transacciones del productor, teniendo en cuenta los índices de conversión y los márgenes reconocidos. El acoplo y divulgación de datos sobre precios de animales vivos se dificultan por las variaciones según tipo, edad y condición. Siempre se apreciará una información actualizada sobre las cantidades ofrecidas, el transporte y las condiciones en que se tiene a los animales, y sobre variaciones en los controles veterinarios y de otro tipo que influyen en los desplazamientos y ventas.
3. Clasificación de calidades
Para crear mercados de exportación para la carne es importante aplicar un sistema coherente de clasificación de calidades. Los compradores potenciales de otros países deben saber con precisión qué calidad de carne se les ofrece; deben estar en condiciones de negociar precios e indemnizaciones con arreglo a normas convenidas. La determinación formal de calidades tal vez sea de menos utilidad en el mercado interno, especialmente en comunidades de bajos ingresos donde la mayor parte de los consumidores compran carne en pequeñas cantidades para guisar. Sin embargo, pueden servirse cortes especiales o calidades superiores a los grupos de ingresos altos que pueden pagarlos. Esto no requiere necesariamente el establecimiento de un sistema nacional, organizado por los servicios estatales, y ano menos un sistema obligatorio que tenga que ser utilizado por todo el mundo. Por lo que respecta al sector privado que comercia en ganado o carne, son los compradores importantes los que muchas veces establecen con más eficacia las normas de calidad.
4. Apoyo gubernamental
La participación del sector público en el mercadeo de ganado y carne suele ser débil donde hace falta y perturbadora o explotadora donde no se necesita.
Los centros en que podía ser muy útil esa participación, pero donde muchas veces faltan los recursos y el rendimiento es lento, son los sistemas de comunicación e información, los servicios portuarios y de transporte, y algunos servicios veterinarios. La participación gubernamental directa en el comercio del ganado y de la carne, no es esencial y a menudo disturba, especialmente si ello lleva consigo el establecimiento de monopolios comerciales, topes rígidos de precios y controles arbitrarios sobre el desplazamiento del ganado.
La falta de personal calificado ha sido un gran obstáculo en la planificación y apoyo gubernamentales. Muchos son los gobiernos que tienen todavía que establecer un servicio dotado de personal calificado y dinámico que pueda analizar los problemas y determinar prioridades de políticas que aseguren un desarrollo autónomo.
5. Cooperativas
En el sector ganadero se dan características que lo hacen menos apropiado para el mercadeo en régimen de cooperativa, que en muchos otros productos. El ganado vivo necesita una cuidadosa atención; una vez sacrificado, la carne es muy perecedera, y en ambos casos la normalización es difícil. Las situaciones variables de abastecimiento requieren flexibilidad en la adopción de decisiones para atender al consumidor y conservar la confianza del productor. Por estas razones, en los paises en desarrollo ha resultado difícil encontrar suficientes gerentes calificados para una comercialización eficaz en régimen de cooperativa en el sector ganadero y cárnico.
6. Matanza en la zona productora
Requiere inversiones en medios de almacenamiento y transporte refrigerados, que pueden resultar difíciles de mantener. La dependencia de la capacidad en una determinada zona de producción o canal de abastecimiento constituye un riesgo adicional. Deben también ser claras las relaciones entre el matadero, sus proveedores, los distribuidores de carne y el mercado. Se reducen las posibilidades de fracaso cuando las decisiones se basan en estudios de viabilidad en los que entran todas las consideraciones pertinentes de orden técnico, comercial y de costos. Para hacer estos estudios, es conveniente recurrir a equipos cuya objetividad esté asegurada y que comprenda personas con experiencia local. Entretanto, pueden proporcionarse servicios y medios que mejoren considerablemente el traslado del ganado por carretera o ferrocarril.
7. Parcelas de engorde
Las probabilidades de que sean rentables en los paises donde hay excedentes de ganado parecen ser escasas. La lenta respuesta a la alimentación complementaria de los animales que subsisten en condiciones de pastizales se refuerza por la tendencia a fijar el precio de la carne a paridad de exportación y el de los piensos a paridad de importación. Se ha llegado a esta conclusión en los territorios áridos nordoccidentales de Australia, que se apoya también en la experiencia acumulada en Africa. Sin embargo, una parcela de engorde vinculada a un matadero de exportación en Swazilandia ha dado buenos resultados. En consecuencia para el fomento del mercadeo en general deben hallarse salidas para la carne de calidad que proviene de dehesas.
El fabricante de equipo: su principal interés es obtener un contrato.
8. Decisiones en materia de inversiones
En un estudio de 70 instalaciones de elaboración creadas en Africa y que han fracasado se observa que 18 de ellas eran mataderos. El estudio se concluyó en los años sesenta. Las condiciones que llevan al establecimiento de esas instalaciones son de carácter repetitivo. Las personas que han ganado experiencia con errores anteriores dejan el lugar a nuevos planificadores nacionales, nuevos dirigentes políticos y nuevos organismos donantes, que llegan con nuevas ambiciones, las mismas que sus predecesores ven ahora como trampas familiares. Influyen en esto:
La gestación del matadero de Lesotho sirve de ejemplo de cómo actúan estas influencias.
ALDINGTON, T.J. y WILSON, F.A. The marketing of beef in Kenya. Nairobi, University 1968 College.
ANSELI, D.J. Cattle marketing in Botswana. University of Reading. 1971
ARIZA-NINO, E.J. et al. Livestock and meat marketing in West Africa, Volume Synthesis: 1980 Upper Volta. Ann Arbor, Center for Research on Economic Development, University of Michigan.
FAO. Comercialización de huevos y aves de corral, por G. F. Stewart y J. C. Abbott. 4' ed. 1977a Roma. FAO: Guía de Mercadeo N° 4.
FAO. Comercialización de ganado y carne, por M.G. Fenn. 2' ed. Roma. FAO: Guía de 1977b Mercadeo N° 3.
MITTENDORF, H.J. Mataderos en los paises en desarrollo, factores que influyen en su emplazumiento 1978 Rev. Mund. Zoo. 25:13-17.
REUSSE, E. La economía ganadera nómada en Somalia-su reacción lucrativa a una oportunidad 1982 de exportación. Rev. Mund. Zoo. 43:2-11.
SIMOONS, F.J. Eat not this flesh: food avoidances in the Old World. Madison, University of 1961 Wisconsin Press.
Los fertilizantes minerales constituyen un medio importante para elevar la productividad agrícola. Junto con las semillas mejoradas y los productos químicos para proteger las plantas contra enfermedades, plagas y malezas, los fertilizantes permiten al agricultor lograr rendimientos máximos del suelo. Por lo tanto, es indispensable que se disponga de ellos fácil y convenientemente. El fortalecimiento de los sistemas de distribución de insumos que abastecen a los agricultores, pequeños y grandes, y a los productores de cultivos alimentarios y de exportación, constituye una responsabilidad crucial de los gobiernos de los paises en desarrollo.
En este capítulo se exponen algunas de las lineas principales de mejoras. Se trata en particular el tema de los fertilizantes, pero con las adaptaciones del caso, su aplicación es válida para otros insumos.
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